Si no podemos fiarse en las palabras y en los Hechos de los Apóstoles, tampoco podemos confiar, en lo que ellos escribieron en los Evangelios de las palabras de Jesús. Verdaderamente esto es un ataque del diablo contra la autoridad de los Apóstoles y la Verdad Bíblica; y la persona que dice esto; piensa que es más sabio que los Apóstoles. Con